Ven, sígueme 2025. Recursos SUD gratuitos para la Primaria. Mayo 26-Junio 1, DyC 51-57
- redwallace
- May 27
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Updated: May 31
Puedo ser honrado.
Para ayudar a los niños a aprender lo que significa ser honrado, podrían leer juntos Doctrina y Convenios 51:9 y compartir historias de niños que enfrentan decisiones en cuanto a ser honrados. Podrías utilizar ilustraciones, títeres hechos con calcetines o muñecos de papel para que los relatos sean más interesantes. ¿Cómo nos bendice el Señor cuando nos esforzamos por ser honrados?
También podrías jugar a "¡Botón, botón! ¿Quién tiene el botón?" ¿Que pasaria si alguien no cerrara los ojos o echara un vistazo? ¿Arruinaría el juego?
Aquí hay una linda familia que te muestra cómo jugarlo. El video esta en ingles, pero todavía se pueden apreciar las reglas del juego:
Esto es de hace cuatro años, pero creo que sigue siendo genial.
Canten una canción sobre la honestidad, como "Defiende el bien" (pagina 81, canciones para niños). Compartan su testimonio sobre la importancia de ser honestos.
Consejo: Coloque un sobre en la parte posterior de la página principal para guardar las piezas, lo que le permitirá reutilizarlas sin perderlas.
Haz clic en la imagen para descargar el libro para colorear de esta semana:
Aquí hay un video que demuestra como ensamblarlo:
Recibo el don del Espíritu Santo mediante la imposición de manos.
En Doctrina y Convenios 51–57 se menciona varias veces la recepción del Espíritu Santo por la imposición de manos. Esta podría ser una buena oportunidad para enseñar a los niños sobre esa ordenanza. Por ejemplo, podrían ver una ilustración de un niño que está siendo confirmado y describir lo que está sucediendo. Pídeles que aplaudan cada vez que escuchen la frase “imponiendo las manos” o “imposición de manos” conforme leas Doctrina y Convenios 52:10; 53:3; 55:1.
Creo que sería divertido mostrarles al niño siendo confirmado y preguntarles qué saben sobre la imposición de manos; quizás tengan un hermano o hermana a quien le haya pasado esto después de bautizarse, o aun a ellos mismos. Luego, muéstrenles cómo se mueven las manos hacia arriba para mostrar el Espíritu Santo. Pueden deslizarlas hacia arriba y hacia abajo mientras leen las Escrituras que sugiere el manual.
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También podrían cantar “El Espíritu Santo” (Canciones para los niños, pág. 56) o una canción similar. Ayuda a los niños a encontrar palabras y frases en la canción que enseñen sobre el don del Espíritu Santo.
Dios tiene una norma o un patrón para ayudarme a no ser engañado.
A fin de enseñar acerca del patrón del Señor para evitar el engaño, podrías empezar por ayudar a los niños a encontrar ejemplos de patrones existentes en la naturaleza, en mantas o ropa colorida, o en la vida diaria. Ayúdalos a encontrar la norma o el patrón que el Señor dio en Doctrina y Convenios 52:14–15. Asegúrate de que entiendan las palabras desconocidas de esos versículos. ¿Cómo podemos usar ese patrón para reconocer la verdad?
Para los niños mas pequeños:
Pisando piedras. Creo que sería divertido que los niños pisen (o se acerquen) a cada figura y digan qué figura es. Verán un patrón. (También hay un patrón de color si imprimen a color). Luego, si quieren, pueden decir las palabras de la escritura al ritmo de sus pasos. Después de que todos hayan tenido su turno, comparta la escritura con ellos y vean si pueden captar el ritmo y el patrón.
Si quieres que cada piedra tenga un tamaño de página de 8,5 x 11, descarga el archivo comprimido en blanco y negro AQUI
Para el archivo comprimido en color, haz clic AQUI
Si estas bien con tres figuras en una página, puedes imprimirlas a continuación.
Para estudiantes mayores:
Primero comparte la escritura, luego sal y busca patrones en la naturaleza. ¿No es asombroso cómo Dios obra con patrones? Si sientes que no tienes mucho tiempo, lleva algo de la naturaleza a la clase, como una hoja, una ramita o la corteza de un árbol. Aquí tienes algunas imágenes para inspirarte:
Siempre debo guardar mis convenios.
Con tus propias palabras, comparte con los niños lo que les sucedió a los santos que fueron a vivir a la tierra de Leman Copley (véase el encabezamiento de la sección 54). Los niños podrían simular ser miembros de la Iglesia que llegaron a Ohio. ¿Cómo se habrían sentido después de que Leman quebrantara su convenio? ¿Qué nos enseña eso sobre guardar nuestros convenios o cumplir nuestras promesas? Lean juntos Doctrina y Convenios 54:6 y descubran las bendiciones que se mencionan para las personas que guardan sus convenios.
Esto es de hace 4 años, pero todavía creo que es realmente bueno.
Recuerde a los niños que, al ser bautizados, harán convenio, o promesa, de obedecer el mandamiento de Dios. Léales en DyC 54:6 cómo el Señor bendice a quienes cumplen sus convenios.
Aquí hay algunos mini rompecabezas que pueden hacer mientras hablas de esto.
Para estudiantes mayores:
DyC 54
Siempre debo guardar mis convenios.
Recuerde a los niños los convenios que hicieron al bautizarse (véase Mosíah 18:8-10). Ayúdelos a pensar en cómo los están cumpliendo y a comprender cómo esto los preparará para hacer convenios adicionales en el futuro.
Hablen sobre cada pieza de la cadena a medida que las unen. Conecten la imagen de Jesús con la imagen del niño bautizándose. Den testimonio de que cumplir nuestras promesas nos mantiene conectados con Jesús y nuestro Padre Celestial.
Puedo hacer uso de las bendiciones que Dios me ha dado para bendecir a los demás.
Para presentar la sección 55, puedes explicar que William W. Phelps era un editor de periódicos que conoció el Evangelio y se unió a la Iglesia. Lee con los niños Doctrina y Convenios 55:1–4 y ayúdalos a descubrir lo que Dios quería que William hiciera. ¿Cómo planeaba Dios utilizar los talentos de William? Esto podría dar pie a un análisis sobre cómo Dios podría invitarnos a usar nuestros talentos para bendecir a Sus niños.
Para estudiantes mayores: Esconda estas palabras por el salón. Invite a los niños a encontrarlas y luego a buscarlas en DyC 51:19. Lean el versículo y luego comenten qué significa ser mayordomo.
Recorta las letras y colócalas en una bolsa o un tazón. Pide a los niños que saquen una letra y te digan un talento que tengan (o que tenga alguien de la clase) que empiece con esa letra. Luego, pídeles que te digan cómo pueden usar ese talento para servir a Dios y a sus hijos.
